En el espejo del juglar español

No solo es el Juglar el que amanece,

y a su almohada invita a una sonrisa,

del sueño improvisada poetisa,

que en el espejo muta y desvanece.


Os juro que mi vientre no florece.

¿Entradas? Se fue joven y con prisa.

¿Arrugas? Si mi piel es firme y lisa…

(y mi mirada miope las decrece).


Como antes ya no corro maratones,

voy en bici de truco inconfesable:

kit eléctrico brioso y opulento.


Me llevan a pensar estas cuestiones

que el tiempo no resulta canjeable

y sabe que al mirarme no le miento.

 

Jejeje.
Bonito detalle esta glosa que escribes a mi poema "El espejo".
Así es, todo depende del color del cristal con que se mira, sabiendo que, efectivamente, el tiempo pasa... pero nunca en balde.
Saludos, Cyrano!

 

Me has hecho la mitad del trabajo.
Un abrazo
Cyrano

 

Bonitos versos inspirados por un poeta y escritos por otro, buen provecho a ambos, saludos hasta Vitoria, si es que andas por allí.

 

Gracias y aquí seguimos, en Vitoria.
Un abrazo
Cyrano

 

Es un espejo muy grande donde muchos podemos reflejarnos.
Un abrazo, Cyrano.

 

Cada día, tu lo has dicho.
Saludos

Cyrano

 

Veo que el poema, reflejo en el que se proyecta nuestra persona cada día, mes a mes, años a año, toda una vida... ha despertado interés. Supongo porque todos de alguna manera nos hemos visto reflejados, no solo en el espejo, si no en la esencia de la composición.
En cualquier caso, a pesar de los detalles que proyecta nuestro físico al haber perdido vida pero a la vez ganado experiencia, hay algo más que nos hace auténticos: está en nuestras manos la manera en que aceptemos el paso del tiempo...
"...
aquella que susurra que estás viejo.
¡Qué coño! - te convences -
lo bueno es siempre añejo.
Es solo una ilusión. ¡En absoluto!"

Gracias a todos por la alusión al tema que inspiró a Cyrano.

 

Tu silva me gustó mucho.

Cyrano