En ingrima soledad

La soledad entre estas cuatro paredes
Es una vez más mi única compañía
Abatido por esta;
Busco refugio en el lápiz y el papel
La amistad ya no es la salida
Y ni si quiera se asemeja
Al objetivo de mi búsqueda
Esta epopeya ha sido larga
Y llena de infructuosas apariciones
Desolado ya y sin fuerzas
Me pregunto si hallare respuesta
En tan larga búsqueda
¿Si valió la pena el esmero con que se pulió el alma?
Y si es así ¿por qué no encuentro un postor que valore tan delicado valor?
La paciencia se agota y la esperanza cede
Confundida pero no rendida
La conciencia me grita mantente tranquilo
Mientras el corazón punza con deseos y hambre
Corazón preso en soledad me embaraza en dudas
¿En dónde estará la musa con las alas de mi prosa?
El cruel destino acalla la esperanza
Mientras el gélido aire de tan oscura noche paraliza mi inspiración
La conciencia detiene mis más fuertes impulsos
Mantendré tranquilo al corazón infeliz
Pues hoy al igual que ayer
No te encuentro para saciar su hambre.
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hi poeta melancolico.
la soledad solo nos acompaña cuando la invitamos a pasar.
es un gran poema. me agrado mucho. espero que no te sientas siempre asi.
las musas se escurren pero saber que estan ahi puede ser un gran alivio
chao. espero saber de ti pronto

 

A lo bien lo leíste ?
gracias por las palabras.
No me esperaba una respuesta tan pronto.

 

La soledad puede resultar penosa, sin embargo creo que es necesaria... Sobre todo para escribir, meditar, tratar de conseguir paz con el mundo y con uno mismo... No siempre se puede estar de a dos...
El poema como tal me gustó, el único detalle es que cuides las mayúsculas.
Un placer leerte.
Abrazo cordial.