En la bodega.

Todo está saliendo mal, ¡ Menudo disparate !
¿ Para qué queremos más ? ¡ Ay, cálmate !
Virgencita, que me quede como estoy. Un rezo.
Y en esta Divina Comedia, hay actores, actrices, escenario y atrezzo.


Rocas de cartón-piedra, cielo simulado, montañas en miniatura...


Es nuestra Literatura.
También podría ser pintura al óleo, sobre lienzo.
O alfarería, sobre el torno, para que las ánforas y tinajas tengan cintura.
Podríamos trabajar la piel del vacuno: El cuero.


Si os soy sincero, no sé qué prefiero.





El éxito, en la cresta de la ola, dura algunos años, tan sólo.
En seguida se nos lleva el viento, que se llama Eolo.
A otras cúspides de tranquilidad, y sosiego.
El genio, entonces, en sus aprendices delega.


Como quien vive en la bodega...

 

Es verdad que el éxito dura poco pero se disfruta un montón, al menos los que valoramos cada minuto de nuestra existencia. Abrazos, buen poema.

 

Gracias, amiga.
Soy como el coche viejo, que va a la chatarrería.
Je, je, je.