En la ciudad.

En los bares hablando del bien y del mal
hasta el amanecer
corriente a la muerte vivo el tiempo restante.

No se de dónde vengo
pero se que me dirigo a alguna parte de algo.

Encuentro cosas lentamente
sin prisa para no llegar tarde.

La alarma de las ambulancias suenan en frente
como una música hipnótica
desde Vietnam a los Andes.

Tengo planes,
quiero sobrevivir con mi traje
y no ser un cadaver.

En este circo donde todo está en venta
aprendí que las cosas que valen mucho
no pueden comprarse.


...

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