En memoria a la señora Rosario de Cuenca Esteban.

Mi corazón está llorando de tristeza

Esto lo digo con sinceridad

Partió la dama de gran fortaleza

Ya se ha marchado hacia la eternidad.


Poseedora de un don maravilloso

Inagotable por siempre su poesía

Haberla conocido fue grandioso

Contagiaba su optimismo y alegría.



A ella le agradezco sus conceptos

Que me otorgó en diversas ocasiones

A cambio le entregué mis bendiciones

Atesoro en mi memoria sus afectos.


Que el Señor la reciba entre sus brazos

Ya ha descansado de sus padeceres

Que guíe a sus seres a estrechar los lazos

De consuelo, de paz, de los ayeres.


Jamás la olvidaré mi gran señora

Su recuerdo vivirá siempre en mi mente

En el portal, su poesía estará vigente

Y su sonrisa, renacerá en cada aurora.


En memoria de la señora Rosario de Cuenca Esteban.

Respetuosamente.

Forjador.

Septiembre 11 del 2013.​

 

Un hermoso y merecido poema para nuestra amiga Rosario.
Bendiciones.

 

Gracias Lourdes C.
Por su comentario, éste es un pequeño y respetuoso homenaje para la señora Rosario, por todo lo que nos otorgó en vida con sus palabras de aliento y con toda su poesía.
Saludos.