Encontrarla.

Podría decirse puro deseo,
no hablo la lengua del romance.
ella encendió algo dentro,
que no puede ni quiere apagarse.

Nunca sentí yo lo mismo,
por ninguna otra mujer,
caí en un ciclo repetitivo,
soñarla y volverla a ver.

Es que recibí quizás,
mas de lo tolerable,
tuve que verla pasar,
a salvo ya no probable.

Pero no me arrepiento,
si este fuera mi final,
respirando su aliento,
naufragando en su mar.

Llevarla en la sangre,
tan divina y nociva,
no creí enfermarme,
ni existe medicina.

Despertar bañado en sudor,
breves lapsos sentía mejoría,
imaginando su dulce voz,
delirando por compañía.

Estar inmerso en apatía,
desde apenas conocerla,
comer labor la familia,
nada importa solo ella.

Sé que está ahí afuera,
muero por encontrarla,
aunque perderle deba,
me salva y luego mata…

 

Cuanto anhelo mi querido Mike, el amor a veces no es tan grato,
pero siempre hay que darle una oportunidad, gracias por dejarnos
tus letras, he disfrutado su lectura. Besitos apretados en tus mejillas.