Energía sin apodo

Hoy me vuelve Dios al pensamiento
y mientras tanto,
escribo lo que siento
en mi tormento.

Quizás sea energía sin apodo,
quizás sea el cielo, el mar, el fuego, el lodo.
Quizás la tierra sea todo, o casi nada,
frente a la grandeza del big bang.

Quizás demonios sean lava,
y ángeles las nubes,
en el fondo no lo sabes,
¿tú que crees que ves?

Puede que las duras garras
de ignorancia,
sean en realidad,
impulso para avanzar,
con elegancia
por la vida.

Yo no sabía que existía
tanta luz,
en tan pocas rimas,
dime cuál de ellas,
te da paz de espíritu.
De tú a tú, cuentamé quien eres,
detrás de las sienes,
con qúe te entretienes.

Yo pacientemente
intento
no tener ideas pendientes,
nado a contracorriente.

De vez en cuando
siento,
que un duende
me mira y ríe,
me acostumbré
a imaginar la vida
en cuento,
para no caer en lamento,
al percibir
que el sentimiento
yace muerto
en cada corazón
que roza el viento.

 

Quizás la tierra sea todo o casi nada...
La ignorancia es un regalo de los que es mejor tener guardados en el baúl o tirar a la basura que disfrutarlo cada día.
Me encantan tus planteamientos, yo también soy de los que imagina la vida en cuento
Gracias por compartir su arte, ¡es una maravilla!