Entre ojos y miradas

Más allá del horizonte de mis ojos,
están los tuyos en alargue de existencia
y entonces todo los ojos,
dejan sus miradas en el azul del mar
cuando se cansan de mirar.
Vi tus pupilas yendo y viniendo con la marea
y porque tengo un asunto no resuelto
voy a la rocas más horadada para mirarte.
Para mirarte las manos inquietas de dudas
cuando eres ausente y rebuscas entre tus cosas
el papelillo y el filtro de las señales de humo.
Todo lo miro desde la roca más ojos
y ella me presta sus rincones por un rato
y me habla de cosas mientras no me mira:
-que no puedo quedarme mucho rato-
-que tiene invitados-
o que la ola más grande va a ocupar su situal.
Yo le digo que sí y que voy a irme.
Que sólo a veces se me pierden tus ojos
y los encuentro en los horizontes marinos
si me pongo en una de sus ventanas.
¡Allí están!
Vienen con urgencia a sitiar mis fronteras.

Tus ojos
Tu mirada
dejan luz en todos mis asuntos no resueltos.




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Elisalle (María Margarita Pérez Vallejos)
06/02/2018
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Vale más una mirada que mil palabras, los ojos son el espejo del alma... son dichos casi topicos que podrían aplicarse desde mi punto de vista a tu bello poema, como siempre gran esencia poética en tus sensibles palabras, leerte es adentrarse en sentimientos que me son familiares. Me ha gustado mucho amiga María Margarita. Un abrazo. Paco.

 

Muchas gracias Paco. Un abrazo. El mundo cabe en una mirada.

 

Me encanta la dulzura que derrochas en estos versos tan sentidos. Los ojos como puertas, como búsqueda, como encuentro necesario de las almas. Miradas que convierten, que poseen, que dan sentido. Miradas que son luz e iluminan. Un cordial abrazo.