Envidio ser ella

Envidio a tu fiel compañera
cómplice inerte que oscila a tu antojo
que feliz se presta a ser tu desahogo
Envidio en tus manos ser presa
sentir el roce de tus labios
en tanto, ausente atrapas tus recuerdos
Envidio estar frente a tus ojos
escuchar tu mente para otros callada
ser arrastrada por todos tus deseos
Envidio ser motivo de tus desvelos
aliada del silencio que buscas para envolverte
cuando la fría soledad te torna vulnerable
Envidio sea ella y no yo
quien te haga perder la noción del tiempo
quien comparte tu inspiración con pergaminos
Envidio ser siempre ella
que sabe de ti lo que tú mismo ignoras
que ansiosa plasma lo que anhelas
Envidio no poder de entre tus dedos
escribir tus sentimientos
más como ella sé, me sería imposible.

Por tanto mi querido poeta
Me conformaré con sólo leerlos.

 

Las mujeres en sí son poesía, música, todo; solo falta quien se encargue y goce de ello. Gusto leerte, saludos y estrellas de tu amigo A.G.

 

Así es A.G., las mujeres somos poesía para quienes nos saben valorar, porque existen quienes no lo saben. saludos y gracias por leerme...

 

Hola amiga querida, es cierto
que la mejor amiga de un poeta es su pluma
y son esas musas que le hablan al oído y le susurran versos.
Un abrazo y un saludo de Eladio.

 

Un poema que destila belleza a raudales y que embriaga suspiros en cada latido que da.
Me encantó, besos.

 

Un triste sentir que deja toda tu sensibilidad en este poema de gran belleza, un gusto pasar por esta lectura. Saludos cordiales.

 

No tienes nada que envidiar. Llevas la belleza, el amor y la poesía dentro de ti.
Con cariño, humildad y gratitud recibo este regalo.
Muchos besos amiga.