Epifania

EPIFANIA
Por mucho que galopen jorobados,
a volantes astados inalcanzan;
meses antes, los párvulos afianzan,
con cebos rojos, blancos ribeteados.

Generosos empeños son canjeados
por consumistas dádivas que avanzan,
con eslóganes únicos que lanzan
a íntimos sentimientos acoplados.

Y como mago, el torturado padre,
quien financia magnánimos presentes,
aunque el parco salario no le cuadre.

Bajo el puente con Reyes tan ausentes,
El Crío de Oro, en regazo de su Madre,
con trapos y alimentos deficientes.

 

Así es Castro amigo estimado,
todo es consumo, la victoria
del salvaje capitalismo consumista
que consigue engañarnos
para que le devolvamos
las míseras monedas que nos paga
por nuestros trabajos de esclavos.
Un abrazo.

 

Un fantástico soneto, cuyo contenido sigue siendo tan actual hoy, como cuando fue creado.
Celebro siempre llegar a tu espacio y beber de esa maravillosa fuente de poesía que mana de tu pluma.
Un abrazo, Castro.

 

Como te he comentado en tu poema sobre el mismo tema los artificios comerciales son inmensos y nuestros modestos camellos nada pueden competir con los supersónicos renos del mercado yankee, además la fiesta de S. Claus es anterior.
Gracias amigo Eladio por rescatar este escrito.
Castro.

 

Gracias, Delamar, por leerme.
Un abrazo.
Castro.