Escombros y gritos

Nadie me escucha.
Dejé de tener voz,
ellos me la han robado.

Los escombros
en mis pies se clavan.
Mientras,
veo la vida
que se escapa.

Ya no tengo futuro
y mi presente
de un hilo prende.

Quizás mañana
mi vida sólo sea
un viento frío.

Las bombas ya no me hacen daño.
Dejé de oír los gritos,
a mi madre.

Dejé de ver un mundo injusto.
Pues mis ojos inocentes se han cerrado,
y en mi interior,
el vacío se apodera de mi ser.

Desde aquí, te pido por favor,
que ayudes a lo que como yo son.
Como yo viven,
y, que como yo,
son refugiados.​

​

 

mae, claudia, los ojos inocentes no existen.

este es en un mundo donde ser mierda e hijo de puta se pasa de una generación a otra. y donde ser un idiota es más que contagioso.

¿cómo coño van a tener oportunidá los débiles?

ni siquiera peleando. todas las luchas están arregladas.

salud.

 

Hablo desde la perspectiva de una niña siria. Una niña que no ha tenido culpa de nacer dónde ha nacido. Son ojos inocentes porque son los ojos de una niña que lo ha perdido todo y que finalmente muere.
Saludos.

 

sirios, rohingyas, palestinos, chiapanecos, sudaneses, hutus, chams, indígenas, gente que habla lenguas de las que no tenemos ni puta idea, gente que vive en el culo del mundo. pongámoles el nombre que nos ronque.

esa niña de ojos frágiles en un mundo sin inocencia, no tiene oportunidad.

no é solo que esté cabreado porque la carretera qué tengo que tomar está llena de hijos de puta.

es que los hijos de puta son la carretera y tienen todo tan bien montado que no te dejan salirte de ella.