Estigma en mi alma

El abismo a la salida
no es de tus recuerdos perdidos,
es el vacío de tu palabra en mi oído.

La mirada de poca luz,
no es página de penas,
es la ceguedad a tu mano fecunda.

No es pan para saciar tu hambre
lo que tengo en las manos,
son sólo las migajas de vida que me dejaste
en la vieja lámpara que se pierde en el mar de la noche.

No es larga cadena en metros
lo que cuelga en mi pecho inerte,
es la innombrable cicatriz de tu maltratar mi alma.

El agua en el piso no es del vaso roto,
son mi lágrimas que han muerto
cada día en tu puerta.

No he cubierto mi naturaleza enferma
de ausencia de luna llena,
solo maquillo cada estigma que dejó tu celo de febrero,
y opaco el rojo de mi sangre de pájaro herido
que desciende por mi oxidada memoria de tu maltrato,
de tu maltratar mi alma de otoños febriles.

No es que sigo tendida en el piso de dolor,
es que ya me acostumbro a tu miseria perpetua
de amor regalado...

 

Me gusta, me gusta. La forma en que llevas tanto peso y dolor en el escrito es fascinante. Especialmente me han llamado mucho la ateción los versos que he subrayado en negrita.

Mis saludos cordiales y mis estrellas merecidas para usted.

 

De verdad es un placer que te gusten mis versos...
saludo dominicano

 

un poema tan precioso como trágico... es un río de sentimientos encontrados que desembocan en un mar oscuro lleno de sufrimientos... saludos. Fuerza.

 

Gracias amigo por leerme...
saludos

 

Tristes pinceladas Alma.

Gracisa por compartir tu versar.

Un abrazo.

 

Gracias nuevamente por leerme,
y por lo tus comentarios, me animan bastante.