Fantasma. Soneto en bar.

No tuvo más opción que ahogarse en llanto
perdida en su voraz impedimento,
la muerte le quebró su fundamento
y Parca le quebró con su quebranto.

Hoy muerta se amortaja en desencanto
envuelta en un sudario ceniciento,
su espectro se entrelaza con el viento
vestida de agonía mientras tanto.

Fantasma no se aquieta en sepultura
y busca entre la tierra la salida
soñando con su caja en apertura...

Fantasma suele darse a la bebida
en antros de indecente catadura
por ver si con el ron vuelve a la vida.

 

Wow... la tragedia en tu poema, me ha golpeado.
Me produce una empatía terrible, como si mi espíritu se arrojase por la ventana con el sólo fin de sentir el vértigo y saberse con vida. Si, conozco el sentimiento.

que decir... más que te dejo mis estrellas.

Un abrazo.

 

Tétrico soneto. Fantasmas de ese tipo se ven todos los días rondando las tabernas.

 

Fantasmas de carne y hueso... Un gusto leerte

 

Gracias Erizo, por leerme y por tus estrellas. Un abrazo.

 

Verdad dices. Gracias amigo Ángel por leerme.

 

Gracias Hate. El gusto es mío.