Farallón de mi montaña

¿Has visto cómo pinta el sol
los farellones de la montaña?

¿Sabías que lleva siglos estelares,
luchando a la oscuridad eterna
del lado secreto de la luna?

¿No Sabías que te pareces al sol o
eres el sol que templa la más
profunda oscuridad de mi alma? Aunque
también eres Luna: que mengua y
crece mi hálito, cuando me miras.

Eres el inmenso océano de los secretos: Mujer.

Compañera del misterio de la pasión.
Amiga de temporales y del remanso
siempre de la mano del rictus que emula
a la más sabia sonrisa queda
que queda suspendida en el aire: eterna.

No eres la neneco de la infancia:
más bien el vigor y el valor y la honra
tantas veces perdida en el esperpento
de la vida del teatro de la apariencia.

No morirás, Mima; no te irás
de este mundo jamás: yo que estoy vivo
lo sé. No te irás. No te irás jamás.

¿Has visto cómo pintas el sol
en los farellones de la mañana?

Tú eres los siglos estelares o
el manantial que surte de aire
estas letras que uno para ti.

Mujer amiga, compañera: océano
de secretos y de mis sueños que
pululan por ti.

 

¡ Madre mía ! compañero de versos
¿ dónde estaba yo que no lo vi ?
Genial,genial...saludos