Guerra

En esa primavera incipiente,
juntos caminabais como niños
a los que se da un día de asueto.

A ti te daba calor su abrazo
cuando bajabais por el camino
y los márgenes se elevaban,
como un muro que os encerraba.

Pero no sentisteis ningún temor,
hubiera estado fuera de lugar
en ese día en que vuestras risas
se expandían por los campos llenos de sol.

Primavera del 38,
no quiero verte con el sepia distante
de las fotos guardadas en cajas de zapatos,
muchos años después.

Quiero retomar el plano
en el que él miraba con deseo
el esplendor de tu escote,
el amarillo de tu pelo,
en ese día lejano lleno de savia joven,
que regalabais.

Bajo el almendro,
el tiempo se detuvo con vosotros.

Le dejaste en el tren.
No recuerdan las golondrinas ese día,
pero no importa.
La memoria construye puentes,
para repintar de colores
lo que una vez fue.


(GIRONA 22/06/07)

 

Hermosa evocación más allá de todo dolor es la que hacen tus versos, poeta. Me ha encantado leerte. Big saludos.

 

Efectivamente Big, es una evocación de unos tiempos, de unas personas que ya no son más que fotos antiguas, guardadas de cualquier modo en cajas de zapatos, que yo he rescatado del olvido.

Gracias por tus comentarios!

Un abrazo

kity

 

Bellas imagenes, lindas prosas adornan tu poema, mis cordiales saludos, cinco estrellas para esa antologia...