… hacia el vértigo

Deseo considerar el pasado transgresor,
porque no me incomoda tenerte a mi lado,
en el auto rumbo al châteaux de esa familia rancia,
coqueteando con tu mirada caprichosa,
al viento el descaro semi fiel,
… después del desastre superado solo unas horas antes,
tienes que intuir que lo que nos aniquila nos junta.
Derivados hacia un fin bastante predecible.
“¿Trajiste los regalos?”,
si,
la fiesta es otro almuerzo mentiroso,
uno simpático abundante en contradicciones de finos trajes,
comprados por esos anquilosados y vetustos millonarios,
… somos los más jóvenes,
les gusta mirar esto que nos rige y nos socava,
… el morbo de oro y joyas al servicio de un banquete acicalado.
el calor en el asfalto,
tus ojos sin fin,
la blusa transparenta la forma de tus hermosos senos,
… de escorzo observo y ¡carajo!... como me agradas,
y ahí está el palacete en medio del bosque,
en sus muros una patina de situaciones insondables,
“olvidé el traje de baño” dices,
creo que no les va importar verte desnuda,
de eso estoy ridículamente seguro.