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Hasta que reviente el mundo

Tema en 'Clásica no competitiva (sin premios)' comenzado por José Salas, 19 de Marzo de 2021. Respuestas: 2 | Visitas: 421

  1. José Salas

    José Salas Poeta recién llegado

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    Hemos tomado el planeta
    como nuestra propiedad,
    llenarlo de suciedad
    es nuestra próxima meta.
    Muy difícil papeleta
    vamos a dejar pendiente
    por nuestro obrar inconsciente;
    flora y fauna destrozada,
    un agua contaminada,
    es decir, todo el ambiente.

    Mas eso no se percibe
    como un mortal batacazo
    pues se mira a largo plazo
    y el daño no nos cohíbe.
    Quemar fuel no se prohíbe,
    el vivir es furibundo,
    el resquemor es profundo,
    pero siempre persistimos
    y sin parar consumimos
    hasta que reviente el mundo.
     
    #1
    Última modificación: 19 de Marzo de 2021
    A Gustavo Cervantes y Manuel Bast les gusta esto.
  2. Manuel Bast

    Manuel Bast Poeta que considera el portal su segunda casa

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    Un par de décimas llenas de verdad, aunque te confieso que ya la meta que estableces en el segundo verso está cumplida a cabalidad, para nuestro mal y desdicha.
    Saludo tu sentir estimado amigo.
    Un abrazo fraterno
     
    #2
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  3. José Salas

    José Salas Poeta recién llegado

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    Así es, amigo Manuel. En la primera décima se refleja el poder que nos hemos atribuido los seres inhumanos de considerar al planeta como propiedad nuestra, cuando la realidad es que somos simples inquilinos y ante la inacción del dueño, lo ensuciamos, contaminamos y destrozamos. En la segunda se observa la ceguera que nos nubla la sesera y nos incapacita para la reflexión del daño que estamos originando y que de seguir así terminará haciendo reventar el mundo. Es como los okupas que invaden una vivienda ajena y tomándose todas las libertades sobre ella, la destrozan; la diferencia es que éstos pueden abandonarla y ocupar otra, mientras que los terrícolas sólo tenemos este planeta y una vez destruido, ya no hay posibilidad de volverlo a habitar, por lo que el resultado es la extinción.
    Esperemos y deseemos que impere la cordura y tengamos la suficiente capacidad para anteponer los intereses de la sociedad a los individuales, pero para conseguir esto, hay que desactivar el gen egoísta que llevamos implantado desde el nacimiento.
    Muchas gracias por tu comentario y recibe un fuerte abrazo.
     
    #3
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