Hay que disfrutarla

Podéis deprimiros y humedecer vuestras mejillas

con fina lluvia de abril,

e incluso conserváis la opción de enturbiar

tímpanos mediante palabras sollozadas.

Realmente,

¿es esa vuestra voluntad?

¿ese es el destino que aspiráis obtener?

Adelante,

continuad llenando cántaros con gotas de tristeza,

expulsad frente a algún rostro vuestros tormentos

y romped la membrana de los que atienden vuestros pesares.

Yo también me he enfrentado a farolas apagadas

y batallado contra infames fotografías del pasado,

cayendo en los brazos del desamparo.

Pero os digo una cosa,amigos:

la soledad

hay que disfrutarla

 

Preciosa hermosura, obra soberbia de arte sobresaliente, bello trabajo divino.