Hierofanía y esperpento

Había sonrisas calculadas para un tigre como este, desamparado tomo la raíz del árbol con toda su fuerza, forzó su quijada hasta que la saco de arriba para afuera sacudiendo así su promontoria cabeza, el tigre no bebía junto a estas raíces un poco de agua, tampoco invistió con consentimiento aquel retraso de la naturaleza, lo que hizo fue quitar esa hermosa raíz del pecho hacia afuera en vista de que aquel animal parecía no haber visto su figura. Digno aquel animal parecía un león, lejano a las esculturas ahora descubiertas, apreciando que su único temor era dormir por ese solo día no tuvo más opción que dormir, el quiso que esto se hiciera público, al siguiente día se escabullo por la noche, la luna parecía un dolor inminente en la sepultura de cualquier animal de la jungla. La última vez que hubo un cielo como este calculábamos que la diferencia entre morir o ser un provecho para la naturaleza estaría en todas partes menos en la selva, cautivados por sentir que es la naturaleza cualquiera puede observar esa grande estrella, es infinita, tiene capaz de tierra en su fondo interestelar, al calcularlo el oso, la piedra, el tigre pueden pasar de verano a invierno y este no es solo el invento que ha sido plasmado en el cielo nocturno de la jungla, al parecer los que tienen menos son los astros fortuitos que invitan a descansar de frente al sol, como un reloj antiguo que amanece en los lados desérticos de la tierra. Este se convirtió en su mundo, el preciso la hora y el momento, nosotros solo aparecimos en aquella época respondiendo a las diabluras de los animales que por no comer lo suficiente ven los arboles devorados siempre originando una nueva vista, una vista espectacular de lo que ahora es la naturaleza del hombre ahora fosilizado en una escultura fuera de lo normal, el lienzo contradictorio de marte, ese lugar donde habita el fuego de los problemas ahí desaparecidos por siglos de numeración artificial hacia el alcance del vencimiento metafísico de la naturaleza en la jungla, del inicio de un decálogo más atractivo.