Humanos

¿Necesitamos realmente creer en un Dios cuando tenemos el cuerpo y el alma de la Naturaleza en su magno esplendor ante nosotros? ¡Hay tanta belleza en el mundo!, ¡y también hay tragedias!, y en ningún lado hay ya espacio para Dios. ¿Quién aún, caprichoso, se digna de rezarle a un cuerpo muerto que descansa entre las nubes? Tenemos cinco sentidos y un sexto sentido que nos permite comprenderlo TODO, ¿qué más podemos pedir? ¿Es, acaso, la vanidad egoísta y ambiciosa la terrible sed de nuestro Ego que nos tortura por dentro con el Miedo y el terror de perdernos en el vasto desierto de nuestras almas más profundas? Para quienes dicen que la humanidad está perdida y no hay ya esperanza, ¡pues es ésa la esperanza!, porque no es estar perdido no existir, podemos todavía encontrarnos, significa; primero con nosotros mismos para luego salir a jugar en el jardín. La Verdad, amigo mío, existe. No importa si es Jesús o Buda quien la contempla cuando cierra los ojos, ¿pero importa ponerle nombre? ¡Ah... nombres!, ¡la trampa del mercado!, una criatura lánguida se desespera por nombrar hasta lo innombrable; mas si las personas no se descubren y al tanto temen el desconocido lenguaje del caos: ¡etiquetar con nombre consecuente a la factibilidad de los hechos divinos y a la realidad de la Fantasía!, ¡no a la fantasía de la realidad!; ¡Naturaleza, Cosmos, Voluntad, Todo, Tao!, ¡El Uno Primordial! ¡POESÍA en fin!, ¡Amor!..., ¡con mayúsculas! ¡La Verdad Absoluta! ¿Pero por qué alucinar con la mano que mueve la pluma que escribe la prosa de la existencia universal? ¿Por qué pensar en un ser con una consciencia y voluntad y por eso llamarlo «Dios»? ¿Por qué crear un espejo si ya tenemos a la noche y sus estrellas, al universo y al espacio? ¿Por qué crear una moral erguida desde los basamentos de una farsa como si no tuviéramos corazón? ¿Es que el Corazón no nos basta? ¡Mentira!, ¡es más que suficiente!, ¡qué el débil y el cobarde NO nos engañe! Porque SOMOS.

 

Dios significa "todopoderoso". Quizás la naturaleza (en la que yo creo) sea "todopoderosa". De acuerdo con usted: somos responsables de nuestros actos, no necesitamos escudarnos en ningún Dios. Se le saluda.

 

El Dios concebido como «naturaleza», en su sentido más abarcativo, es decir, aquello que está en todos lados porque todo es, es el mismo de un Dios impersonal, es decir sin conciencia ni voluntad propias en su sentido antropomórfico; es ese entendimiento el que le da el filósofo Spinoza a «Dios», razón por la cuál fue perseguido por su comunidad hebrea e incluso dicen se le intentó asesinar por ello. A esa misma concepción se afilia Einstein, según sus públicos dichos.
Mis saludos a ti también, muchas gracias por leer y comentar.

 

Nýkolas:
Cualquiera en este momento podría ser Dios. Es absoluto el espacio donde habitamos. Tu podrías serlo ahora mismo para mí.
Divago, me detengo " ...Miedo y el terror de perdernos en el vasto desierto de nuestras almas más profundas? " ... no es estar perdido no existir... AMOR... POESÍA... VERDAD ABSOLUTA... por qué crear un espejo si tengo noche, estrellas, universo, espacio...SOMOS. Gracias reiteradas. Abrazos y besos desde acá ♥

 

Mis gracias reiteradas a ti, diosa Grace. Oh sí, tú sí que eres una bella diosa.