Ignorando la verdad

Y aunque le encuentre sentido,
¿qué sentido hay frente a esta sed eterna?,

la codicia teje trampas de avaricia,
la simpleza, es la complejidad de sus causas,

se cansa mi mano, sin letras, sin corazón,
se diluyen mis frases, sin hojas, sin ojos,

frente al desorden, enfrento a los cielos,
ellos me transmiten la misma inestabilidad,

tratando de equilibrar sus anomalías,
la extrañeza del tiempo es boca,

por donde el deber les susurra a los muertos,
propósitos de neblinas y una luz aparente,

por donde los horizontes mueren,
quedarán los sueños que se abandonan,

por donde he caminado quedará mi suerte,
siempre mirando hacia otro lado.