Ilusiones perdidas

ILUSIONES PERDIDAS

De qué sirve la ilusión
si los padres son los Reyes,
y en los niños su pasión
es estirar bien los muelles,
por esa falsa diversión
como es ver un gran montón,
de regalos que hacen bueyes
a quienes son nuestros fuelles
pues soplan sin compasión,
hasta anular la razón
haciendo de sus caprichos leyes.

Cuando cambia un sentimiento
si es consumo quien controla,
nublando el entendimiento
aunque sea una pirindola;
nuestra meta es comprar trola
que nos venden con talento,
cuantos viviendo del cuento
en las fiestas hacen cola,
embaucando a más de ciento
por tumbarse a la bartola
sin haber oído al viento.

Hoy que cabalgatas vemos
como fiesta trasnochada,
cada año nueva hornada
de incautos reconocemos,
y en su lugar nos ponemos
al terminar la jornada,
viendo esa ilusa mirada
que cuando niños tenemos,
de creer que conseguiremos
todas las ilusiones soñadas,
cuando aquello que ofrecemos
son unas cartas marcadas.

Joanmoypra/enero/2014
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