Informe sobre ausencias

Aún no he aprendido a ignorar tus ausencias periódicas,
tu mirada incontable, que empapa mis palabras de interrogantes,
a tu rutina, a tu musa,
a mis pupilas que sin buscarte te encuentran
& que sin necesidad de cerrarse te miran sin hallarte...

& es que, ¿cómo ignorarte? si te aferraste a mi tobillo,
a mis sueños & a mis costumbres,
a mis ganas de dejar la vida botada a cambio de algún imposible...

Te aferraste a esta vislumbre
que llega a tu encuentro en medio de un montón de nada
(por qué usualmente la nada viene en grandes cantidades)

& sustituyes mis miedos,
& me revuelcas el ego, & tu lo partes,
& ambos lo compartimos,
& aprendes a descifrar mis silencios
(a todos y cada uno de ellos)

Busco mi mitad y la encuentro en la frontera de la tuya,
y entonces aprendo que nunca aprenderé a ignorar tus ausencias,
por qué también estoy ahí,
sin contarme...
pero en efecto, ¿Qué sería de mi ausencia sin tí?