Interminable.

Larga e intensa noche,
Primero las miradas seductoras,
Pieles ardientes ansiosas de rozarse,
Retrasando el momento.
Aumenta el deseo,
Las respiraciones se entrecortan
Las bocas necesitan besos,
Las manos necesitan cuerpos,
Los sexos se estremecen y tiemblan.
¡No te demores más, abrázame!
“No, espera, mírame, quiero ir a ti, pero espera,
Estalla de ansias de poseerme”.
¡No, más no, dame tu cuerpo!
“Tómame, pero juega primero,
Demórate, acaricia, palpa, siente,
Que tu boca me encienda”.
Mi boca entre tus muslos te derrama
En humedades de placer ansiado.
¡Ya, entra en mí, necesito tenerte!
“Cabálgame mi amor, rómpeme el alma
Saliendo por el gozo de mi cuerpo”.
¿Dónde pongo mi esencia?
“En mis pechos, mi boca, en mi entraña…”

Copyright © José Luis Bermejo (El Seneka)
elseneka@hotmail.com

 

Uy..pero...que versos tan candentes...Un poema muy ardiente de deseos y pasiones . Admirable su soltura, que para los mayores a veces nos es dificil ser tan abiertos como los jovenes que pregonan tantas ansiedades. Hace mucho que no publica, sera que esta preparando un libro? Saludos.