Ipiales

Sirena de tus mares, cobíjame en tu canto;
¡que a mitad de un sollozo, se haga tu voz y arrulle!
mis penas, mis temores, mi amargo desencanto
y ocurra que, de nuevo, retorne esto, que huye.

Frente a la mar serena, de plata sus diademas,
que periódicamente las renuevan los vientos;
te visualizo allende revestida de gemas.
Presentes de mi alma que envían mis alientos.

Anhelante del día que a puerto caribeño
arribes y rodearte con mis trémulos brazos
y que tu lecho sean mi pecho y mi regazo.
Y cobijarte toda con mi égida de ensueño.​

 

Magistrales versos Alejandrinos, los disfruto y aplaudo amigo Victor.

 

Exquisito trabajo de expresión poética inspiradora, gracias por compartirnos.

 

RAMIPOETA.-
me halada usted con su visita a mi humilde trabajo, tiempo sin entrar por cuestiones de salud.
Infinitas gracias.
Le aprecio mucho su comentario y cota.
Abrazos hermano querido,

ginoa2.-
Mi querido poeta, como lo escribí previamente, estuve sin conectarme por un tiempo debido a cosas de salud, estoy de vuelta.
Me subyuda plenamente vuestros comentarios y los agradezco, son incentivos para seguir en mis pininos literarios.
Infinitas gracias mi señor.
Saludos y abrazos.

 

Admirable la soberbia obra de alta calidad y emocionante inspiración.
Jorge Lemoine y Bosshardt, "Estrella Máxima" de Mundo Poesía.