Ira (serie Pecados Capitales)

Hoy tengo el corazón en carne viva,
pero no importa: el corazón no duele;
es el molino que mi sangre muele
e impulsa su caudal: rabia opresiva.

Seca tengo la boca, sin saliva,
y el músculo, que late más que suele,
una orden aguarda por que vuele
hoy por su fuerza la función activa.

De un negro abismo mi pasión refluye
e inunda mi visión, fundida en rojo.
De cuanto vive su alentar denigro.

Del polvorín latente de mi enojo
la chispa de la Ira es el peligro:
rencor irracional que odia y destruye.

 

Una muy buena definiciÓn de la ira

 

Gracias, Usue. Me alegra que te haya gustado.

 

Gracias, Julio, pero con que sea correcto me conformo, aunque bendita sea tu apreciación.

Un saludo,

 

Para los que pecamos de "IRA" nos queda como anillo al dedo.

Muy buenas líneas Francisco. Un instructivo gustazo pasear por tus versares.

Un abrazo desde estos lares.

 

Desdichadamente también me excedo en ese pecado, y siempre quedo tocado y contrito por ello.

Gracias una vez más, César.