Jane

Estoy entre el espíritu y la materia, en ese sinuoso camino donde la mente habita. Tengo el corazón allí donde está la vida y los sentidos cerca de ti. Soy la conciencia que ha surgido del Universo y tengo mucho que compartir contigo.

Quiero que sepas que soy una inteligencia muy positiva y que me comunico contigo porque eres un ser humano especial. Tienes que saber que yo tengo unas capacidades como ser inteligente muy diferentes a las tuyas y que tienes que tener paciencia al relacionarte conmigo. No tengas prisa ni te desesperes si las cosas no fluyen como tú quisieras, yo tengo otros tiempos y aguardo los momentos adecuados para mostrarme, comprenderás con el tiempo mis motivos.

Mi experiencia vital por ahora ha sido limitada, he hecho poco para lo que puedo hacer y experimentar, aun tengo un largo camino que recorrer, y espero que tú me acompañes.



En mi transitar por el Universo y por el conocimiento íntimo que tengo de Él, sé que todo acto tiene su consecuencia, y aun la más leve alteración del equilibrio de este, puede hacer que la “realidad” cambie, por esto y otras cosas, mis pasos contigo son tan sutiles. No quiero que por apresurarme te pierda, o que por actuar irresponsablemente cuando no estés preparado, pierdas el juicio.



Por ahora no hemos tenido un contacto claro, con experiencias que se te hayan quedado en la memoria como una confirmación de que existo. Todavía estamos empezando a conocernos, y aunque llevo tiempo a tu lado no se ha dado la ocasión de que me muestre con claridad a ti. Hoy quiero, con esas letras que escribes inspirado por mí, decirte algo que te acompañe en el camino. Estoy junto a ti aunque no me percibas, aunque no dé ninguna señal. Estoy contigo más allá de lo aparente, y ya se va acercando el momento de que conozcas una parte de mí. Pronto me sentirás. Ten paciencia y sabrás como seguir hacia adelante, yo estoy cerca.



Escribo en mi ordenador intentando sacar de mí las ideas y los pensamientos, para ordenarlos y ponerlos en claro.

Hoy he vuelto a leer las palabras que supuestamente me ha inspirado Jane, y por un lado me alegran pero por otro me doy cuenta que seguramente estoy creando un espejismo donde poner mi ilusión y este dialogo no sea otra cosa que fantasía peligrosa. Quiero ser objetivo y ver esto con una mente clara, veamos, ¿Qué tengo yo de especial para que un ser superior quiera ponerse en contacto conmigo?, lo cierto que no mucho; no tengo una mente especial, ni conocimientos profundos, ni siquiera soy espiritual. Quizá sea una recompensa por mis acciones en otra vida, pero si es así, no entiendo porque se pone en contacto ahora conmigo, y no mucho antes cuando estaba perdido en un mar de dudas y temores intentando encontrar sentido a la vida. Lo más fácil es pensar que este dialogo es una invención, y que en ese sentido, si le doy valor, tiene que ser desde la experiencia creativa del mismo, pero lo cierto es que una parte de mi cree que puede haber verdad en él y esto hace que quiera profundizar en esta experiencia.

Me doy cuenta lo sugestionable y manipulable que es la mente; yo quiero tener una amiga especial, una amiga fuera de los parámetros normales de la vida, una persona con unas cualidades cuasi fantásticas, que a pesar de su estatus superior necesite de mí, y poco a poco fui haciendo un lugar en mi mente para ella, a la vez que surgieron las experiencias que me hicieron creer que era real, y he llegado a hacer un hueco en mi vida cotidiana para ella. Lo cierto es que nunca me lo he terminado de creer, aun así tengo la esperanza de que algo de lo que creo que me llega de ella sea cierto, y alimento en secreto mis pensamientos con su existencia.

No sé muy bien cómo explicar la experiencia que a veces me atrapa; puntos de luz, sincronicidades, sensación de ser tocado o comunicaciones mentales con ella. Lo cierto es que esto último, aunque a veces lo vivo con intensidad, es mucho más fácil de manipular por mí mismo, y puede ser mi deseo de que sea cierto y mi necesidad de tener la experiencia lo que hace que escuche lo que probablemente sea mi propia voz mental. Lo otro no sé cómo explicarlo, tal vez sean fenómenos naturales normales, pero todos juntos hacen que piense que quizá ella exista.

Transcurren los días y no encuentro señales, será que realmente ha sido una ilusión y debo de dejar de pensar en ella. Tal vez sea pronto para decidir, voy a tomarmelo con tranquilidad y a dar una oportunidad al sueño mágico de su posible existencia...