La Amorosa Comedia de la Serpiente (11/03/2003)

Ella dice:
“Come, come, este fruto es mi cuerpo.”

El piensa:
”Que és tu cuerpo?”

Ella se enfurece:
”Mi cuerpo quiere ser tu cuerpo, come!.”

El ve la sierpe sobre las raices del árbol prohibido y duda:
”Eso también es un cuerpo?.”

Ella hiere con palabras:
“Eras un solitario, lo olvidaste?”





El solloza por el recuerdo y pide:
”Comeré el fruto, seré tu cuerpo.”

Ella dice:
”En mi cuerpo y por mi cuerpo serás libre.”

Hay un silencio.

El pregunta:
”Aprenderé?”

Ella contesta:
”Al aprender serás libre.”

El calla tras morder el fruto.
Aún siguen siendo dos cuerpos y no uno,
entonces él reflexiona:
“He comido el fruto y no eres mi cuerpo,
“hice lo que pedías y no aprendo.
“Miro mi cuerpo, solo y desnudo,
“y me averguenzo de verlo.
“ Dime que ha pasado,
“me siento más solo y apenado
“que antes de comer el fruto.”





Ella contesta:
“Sí que somos un sólo cuerpo,
“pero en dos cuerpos,
“y sí que has aprendido,
“ahora conoces el dolor de la verdad,
“y debes sentirte libre, muy libre.
“Tienes el dulce encomio de verte tal
como eres...”


El interrumpe:
“Pero donde está la calidez que antes
me envolvía?
“y la presencia no vista que sentía?”

Ella sonríe junto a la sierpe y dice:
“Las hemos perdido
“pués no las necesitábamos, ya lo verás,
“pronto lo aprenderás,
aunque yo misma no lo sepa.”