La bella y el ruiseñor ...

¡Era ella tan bella,
tan bella, tan bella,
que hasta ante ella
un rey se inclinaba
y al paso floreaba
galante adulación,

pues si, era hermosa,
y su cuerpo de diosa
le inspiró admiración,

pero ella le ignoraba
y de frente pasaba
preciosa y sonriente,
para darse ardiente
en el beso impaciente
a un modesto ruiseñor! ...

Anthua62
México 22-08-22

 

Puede resultar así, como de cuento, y en la vida real, poco común pues ante el rey dinero muchas bellas suelen sonreír aceptando la "adulación"... pero en este caso no fue así. Él, un magnate libanés de la tela allá en el centro de la Ciudad de México le ofreció riquezas a cambio de que le diera un hijo a hermosísima mujer ¡y ha cómo insistió tratando de deslumbrarle con su riqueza! "¡Pídeme lo que quieras, vestidos finos, joyas, lo mejor con tal de que seas mía y lo que tú quieras yo te lo doy!" Le imploraba cada vez que acudía a la Boutique donde ella trabajaba muy cerca de la estación Allende del Metro subterráneo de esa Metrópoli ... lugar donde con una flor cada noche (9:00pm, horario en que cerraban el establecimiento), le aguardaba un humilde poeta que lo único que le podía ofrecer era una vida modesta y su ferviente canto ... Ese poeta, era yo, y sí y aunque suene increíble a esa bellísima mujer, le amé desde niño. "El dinero no lo es todo cuando es más valioso el amor".
Besando tu mano querida Bristy ... Gracias.

Anthua62