La dama de la cueva azul

Todo se remonta ante aquella misteriosa caverna
Su tesoro no era oro no joyas, se encontraba en lo más profundo de la tierra
Las aguas de ésta bañaban las paredes y el piso
El interior de la cueva estaba vestida de zafiro

En el centro de un lago brillante se encontraba ella
Una flor tan delicada, una flor tan bella
Su dorada cabellera opacaba la luz de la cueva
Las lagunas de sus ojos eran tan profundas como las que la rodean

Su cuerpo como escultura moldeado en las rocas de la cueva
Joven y ferviente recostada en el suelo de ésta
Su voluptuoso cuerpo que solo era visto por su única admiradora
Que sea la única, que nadie más la admire, es lo que ella implora

Su hermosa voz resonaba entre los túneles de la cueva
Cantos tan hermosos que nadie más entonaba
Su voz quedaba plasmada en las paredes, su voz quedaba plasmada en el agua
Su voz quedaba plasmada en la cueva, su única amada

Ella era una leyenda, muchos buscaban a esa dama perfecta
Pero la cueva se negaba a compartir su tesoro, la cuidaba celosamente
Alejada del mal y los engaños responsables de los hombres
Permanecería siempre como una leyenda, sin que nadie pudiese conocer su rostro ni su nombre

 

Me dejas en suspenso con la identidad de tu musa, pero bien que la tengas en anonimato ya que así tendrás más oportunidad de ir humanizandola. Grato leerte.