La estrategia del amor

LA ESTRATEGIA DEL AMOR


-A tenor de lo dispuesto
pinta el basto en el mesón
y tenemos la ocasión
de completar un buen gesto.
-Pero... ¡Por Dios, hablad presto!
-¿No piensan mis Feligreses
que es preciso ser corteses
al conquistar a una dama?
-¿Y no es mejor la mojama
que este plato de entremeses?

-Sigan, pues, mi teoría
y seamos caballeros,
que a las mozas con ligueros
les gusta la poesía.
-¿Me permitís que me ría?
-¡Ya faltaba la doncella!
-¿Vienes buscando querella?
-Tengo dos buenas razones.
-Se adivina en tus pezones.
-¡Anda, golfo! ¿Otra botella?

-Pero que venga con queso.
-¿De La Mancha o de Castilla?
-La decisión no es sencilla:
ambos son de tentetieso.
-Cuando vuelvas dame un beso.
-¡Eso faltaba, rufián!
-¿Y si te ofrezco champán?
-No, si rostro no te falta
y tu libido se exalta
como lava de volcán.

-Volvamos a nuestro tema
que es el verso y la conquista,
exprimamos al artista
para hacer un buen poema.
-Delicadeza suprema:
ése debe ser el reto,
a lo cual me comprometo.
-¿No será mucha ambición?
-¿Has perdido la razón?
-¡Os dedico este soneto!


SONETO

Ni esmeraldas, ni zafiros, ni turquesas,
son espejos del amor de tu mirada...
¡Tan hermosa, tan sutil y delicada
como armiño de dulcísimas princesas!

Esos ojos de maneras tan traviesas,
esos labios que parecen mermelada...
En mi mente la razón está ofuscada:
¡Soy esclavo de mis tímidas promesas!

En tu talle mis deseos se subliman
esperando una respuesta convincente,
y tus nulas atenciones me lastiman.

Este caldo de cocido está caliente,
y estas mozas a mis carnes no se arriman.
¿Y si pido una copita de aguardiente?


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​

 

Es terrible la resaca
cuando el vino no es ligero,
y la moza del liguero
si te pega es por bellaca.

Saludos. Chu.

 

¿No exagera Epimeteo
la virtudes de un juglar
tan soez y tan vulgar
como un patio de recreo?

Abrazos. Chu.

 

Dios te bendiga, Isidoro,
que el poeta de Toledo
se merece más de un Credo
engalanado con oro.

Un abrazo. Chu.

 

Gracias, Ti... besos. Chu.