La luna siempre agranda las cosas.

Cuando mi rostro subió al barco de la memoria,
mi juventud herida, cayó en el suelo.
Algunos de mis días inocentes gritaron:
¡Dejen que los años desciendan!
Pero el cuerpo de mi sentimiento afilado,
se negó a levantarme de las ruinas.
Y una soledad promiscua se aferró
al mar que cerraba las puertas.
Llegué así hasta la noche derrotada,
la abracé, y nos perdimos en las palabras.
Y la luna que siempre agranda las cosas,
permitió que mi grito estremeciera el abismo.

Filiberto Miño (riomino)
New York.

 

Abstracto poema de inspirado delirio, con todo respeto lo digo, interesantes imagenes, un saludo fraternal poeta.
Alaric.

 

Alaric:
Un verdadero honor para mí, que usted se haya fijado en el poema.Y como bien dice, es una abstracción. Que trato de inclinar hacia un sentimiento casi tangible, con humildes metáforas. Mil gracias, poeta. RIOMINO

 

Muy lindos versos, me gustaron de sobre manera los últimos

 

James Paul. Me alegra mucho que le hayan gustado estos versos. En eso estamos parejo.Porque a mí también me han gustado mucho las cosas que he leido de usted. Es un placer para mí saludarlo. RIOMINO

 

Abstrusa: Un honor que llegues hasta mi pequeña bahia, donde acaricio las imágenes que brotan de mi fantasía. No te imaginas el orgullo que me produce que hayas leído un poema mío.Un gran saludo. RIOMINO