La luna y su himno

La luna vuelve dorada, el vuelo
de la paloma que miente como tierra
y sabe como sal, invitado ha sido el
amor de su embalse con ojos claros.

Ha sido la luna la culpable, viento
con marea, invitados a portar
como única su pesada, en el cielo,
con cara, un oro de una plata o bronce.

Ha venido una amenaza que trae
consigo, bella silueta de giros
y hambre, que con ella la luz es
victoria y el hombre prometido, luna.

Alce las sillas de las palomas
tenga usted real justicia entre un
árbol y su columna, dientes manchados
ruidos entre sal y belleza entre todo.

Muera un hijo entre dientes, cortado
por tal alumbro del mar, protegido
ha sido muerte la belleza de tal
olvido, demuestra la herencia, hacía camino.​

 

Bello poema nos compartes. Te felicito.
Un gusto poder pasar a leerte. Saludos.

 

Me ha encantado mi querido amigo. Un placer estar. Besos con cariño. Brillante pluma. Saludos.