La otra mirada

Salgo a caminar...
Llevo puestos aquellos ojos
que usaba para viajar,
aquellos ojos inmensos
donde entran con holgura
paisajes con mil matices
que ellos sólo pueden dar.

Es la misma caminata
que hice alguna otra vez...
Pero cuanto más hermoso
se ve todo lo que miro
con estos mis nuevos ojos !
Lo que ayer pintaba gris
tiene hoy tantos colores...!
Si parece que las flores
son paleta de un pintor,
y los trinos de las aves
la más deliciosa canción.
Juraría que cuando llevo
estos ojos para mirar
la mirada prende alas,
se eleva para volar,
es que no quiere privarse
de todo lo que hay para ver
tan distinto a lo que veían
los viejos ojos de ayer.

Voy volviendo...
con los ojos sonriendo
cansados de observar
que la vida suele estar
pendiente de otra mirada
... prontos ya para soñar
apenas decida cerrar
las ventanas de estos ojos
que hoy se me dió por llevar.
​

 

¡ Euforia !
Mucho mejor que la tristeza, ¿ Cómo vas a comparar ?
Amor y euforia. Entonces, el Amor es omnisciente.
Omnipotente.
Y bueno...


¿ Hembra ? Estaría bueno, ¿ Verdad ? El Amor es Dulcinea del Toboso. ¡ No me lo puedo creer ! Y creó todo el firmamento. Concentrándolo en sus pechos, su ceño o entrecejo, y su ombligo. Carambolas...

 

N

No te entiendo querido Nommo!
Carambolas... ?

 

Carámbanos... ¡ Repámpanos ! ¡ Rayos, truenos y centellas ! ¡ Atiza ! Caracoles...
¡ Que me aspen si lo que ven mis ojos, es cierto !
¿ El Amor es hembra ? Que alguien me pellizque, pues creo estar soñando.

 

Bello poema. La verdad es que depende de nosotros y de nuestro estado de ánimo percibir la belleza que nos rodea.

 

Gracias por tu visita y comentario.
Un abrazo

 

Este poema celebra la impermanencia de nosotros mismos. Gracias a que evolucionamos podemos ir descubriendo nuevas cosas, mirar otros detalles, cambiar la perspectiva... Gracias, lo he disfrutado mucho.

 

Es gratificante tu óptica sobre el poema. Agradecido !
Un abrazo