La pandemia de los infames

Recién terminaba el año 2019;
El mundo se derrumbaba
como las vivencias
bíblicas del pecado...

Giraba el globo
ante el repliegue de las multitudes
en las horas que fluían
como una carrera infinita
bajo la cotidianidad e indiferencia
de los huesos con carne y alma
en un mundo libertino
de actitud grotesca y demencial

Si, el planeta giraba
y su pupila sólo digería devastación,
hambre,injusticia, ambición, caos, guerras...
Él seguía girando poco a poco
y sus lágrimas contaminadas caían
sobre los bosques triturados,
animales masacrados,
océanos envenenados,
extinción de aves,
fauna y vida natural...

Era 2019,
mientras el planeta en su asombro
observaba grandes ciudades de luces
y sobre ellas águilas
con ojos de serpientes
fornicando en el naufragio
que llevaban por dentro.

El planeta giraba
sosteniendo la maldad
inmisericorde del hombre,
¡La avaricia! ¡La mentira!
¡La crueldad!¡La ambición!
¡La desolación......!

Arañas de los tiempos
devoraban alquimia,
piedra, árbol, conciencias,
huesos, cráneos, esencia,
¡Dignidad!

En el 2019
el universo virtual
robotizaba y alienaba;
el nardo del sexo
como viento de huracán
deshojaba al mundo...

Pero no todo
era oscuridad y abismo,
el planeta aún respiraba
el oxígeno del amor,
el trabajo y los sueños...
Estos florecían en las almas
de las grandes mayorías,
las estaciones deslumbraban
en conciertos de fábula y fantasía,
los enamorados se besaban
a la luz de la luna
y en cada rincón del mundo
en la cotidianidad de sus días,
disfrutaban el agua de la esperanza
abrazando y anhelando la paz,
la armonía y la libertad.

Cual pájaro dorado que fluía
anhelando libertad en gozo pleno,
así mismo giraba el planeta
en el año 2019 (EDC)

Más allá del bien o del mal
donde los tiempos
se engendran mutuamente
y el despertar del nuevo día
se ahoga en las tinieblas del abismo,
el orbe gira en el 2020
con sus insaciables escamas
navegando en un mar desconocido,
respirando la cepa maldita de sus aguas,
inhalando el veneno de lo invisible,
erógeno escorpión programado,
¡Gota de muerte en la garganta!

La destructiva
pandemia de los vientos
invade las agónicas y estresadas
horas del homo sapiens en sus soledades,
cubriéndolas de plúmbea niebla de incienso
con aromas indescifrables
de impotencia y mortandad.

Las sierpes de la infamia
se desdoblan ante su propia
actitud destructiva...

La naturaleza renace silenciosa
en la siesta del ignorante agresor,
los cielos se purifican,
sus ríos se visten de cristal,
las aves disfrutan
su territorio perdido,
los hijos de la mar
nadan dichosos en libertad...,

Hoy 11 de abril del 2020,
la bestia responsable del virus
se retuerce en la tormenta
del asombro, el miedo y la locura...
Todo el poder humano
confluye en los abismos
de la agonía existencial..

Un lejano coro de seres muertos
se despiden sin saber aún por qué....?

En el instante
de la muerte sorpresiva,
pareciera que el tiempo se detuviera
en las plumas de las alas de Dios....

¿Tendrá acaso como el Sida
el Covid 19 vida eterna?

La batalla está perdida...
Mas no la guerra (?)

Padre Nuestro,
que estás en el cielo......



Tato Ospina
DRA
Colombia
​

 

El Dolor es la forma más sencilla de aprendizaje.
Por otro lado, el Universo es una escuela.
En esa escuela, la meta es la búsqueda.
O sea que cada día trae su propio afán.
Y por ello, evolución es disfrute.


No obstante, el Universo es lógico y perfecto, dado que no puede contener errores.


¿ Qué significa eso ?





a ) Si te mato, tú te mueres.
b ) Si bebes agua, te mojarás por dentro.
c ) Si me tiras del pelo, me dolerá el cuero cabelludo.
d ) Si golpeo una campana con un martillo, ésta no se resquebrajará, pues está hecha de metal impenetrable.


Bien. Lógica.


Entonces, si diseñamos un virus muy peligroso, lógicamente, va a matar a 700 millones de humanos.


700 millones de humanos.
Porque el Dolor es la forma más sencilla de aprendizaje.
Y claro, ¿ Qué hay de malo, en diseñar un virus muy peligroso ?


Que supone un crimen social sin precedentes.
Porque las dos guerras mundiales, no son nada.
Tampoco es nada, la conquista de América.
Ni el reparto del pastel de África.


No es nada...


Lo peor de todo, es diseñar un virus tan peligroso. Y Adolf Hitler era un gran amigo.
Un buen amigo.
Como él no sabía diseñar virus peligrosos...
¡ Uff, Hitler, qué gran tipo eres !


Sólo mandaste aniquilar a 6 millones de judíos.
Pero 700 millones de personas, ¿ En el siglo XXI ?
Me entran escalofríos, Adolf.
Te han superado.