La promesa es Mañana

Dulce
Estática
Serena
Reverencia
Gratitud
Complacencia
es la dulce mansedumbre
que acapara esta tarde de cometas
Adiosean los últimos días de septiembre
con un vuelo en caída libre
Hay aromas a prados recién cortados
Elixir de dioses
Estela de golondrinas que asoman discretas
Un naranja en el poniente anuncia ciclos
que acortan tiempo y distancias
Es bueno que se renueven
El alma se dispersa en los jardines
entre asomos de capullos
y fulgurantes estrategias para pensar
que vivir es lo que se tiene
Mansedumbre de pastora
que baja de los cerros con su manada
cantando bajito entre percusiones de cencerros
El descanso es necesario
Es preciso esperar la promesa que hoy se dice Mañana.





***
María Margarita Pérez Vallejos
24/09/2017

Todos los derechos Reservados
Prohibida su reproducción parcial
y/o total por cualquier medio
©
Inscripción: 204.688
Imagen Google
​

 

Precioso poema, bellas imágenes nos revelan tus hermosos versos. un abrazo fraterno.

 

Versos para soñar paseos por cerros, donde revolotean las golondrinas y se escuchan los cencerros. Tarde que se va durmiendo en el dulce ocaso con que el sol poniente la viste. Aromas de descanso. Promesa de un Mañana.
Muy hermoso tu poema, un canto vivificante a la tierra y a la vida. Mis saludos y un beso.
Luis.