La raíz cuadrada de nosotros mismos

-Llegas tarde...
La Punta del iceberg no se mueve con el oleaje.

-Tendrás que hacer mucho más que eso.
Atrévete, busca la veta en el ala y al verla nivelará la rana en la ventana,
talará a la reina y se ventilará la renta.

- Pero recién he llegado.

-Toma, ten la cena, te entraré en la nevera pues una vela
no llena cuando una manzana envenena.

- Bajen las anclas. Hemos llegado.
Revela lo que aprendiste en la escuela,
congela tus sentidos como antenas.

- No entiendo nada de lo que esta pasando

- A su debido tiempo.

- Aún no estoy listo.



- Lo más difícil de una pintura o una partitura
es terminarla y poder llamarle escultura.

- No me queda mucho, mañana es la ceremonia de coronación.
La raíz cuadrada será nombrada Reina.

-SALTA!

El cambio que nada cambia, esconde y tapa desgasta y ata,
con vestimentas nos disfraza.
Allí, donde los Elvis del baño no tienen regaños, mismisidad.
Frente a frente.

Si algo se ha incendiado es porque ya estaba quemado.
No me vengas con que ahora el día está nublado.
Primero en ti lo han sembrado y ahora es la hora de que sea cosechado.

Usando prendas finas de vestir algunos pocos te creerán cuando hayas de mentir.
Estas pensando en ti y en recibir,
te tienes que decidir.

- SALTA!

Es posible cancelar un potencial, una vivencia pasada que hace mal,
Poder multiplicar una división, rechazar todo tipo de comisión
puedes masticar la decisión y explotar el globo hoy.

Suelta la nuez del egoísmo, y eleva al cuadrado la raíz de tu reduccionismo,
así romperás el hechizo y su abismo, empezando por ti mismo y el resultado
seremos nosotros mismos.

-Cuanto le debo?

-Son: ríe.