La tormenta

En cristalino corcel de rayos
galopando sobre relámpagos se ve venir procelosa tormenta;
de racimos de nubes se desgajan los truenos
saltando sobre colinas, montañas y valles;
se alejan presurosos gritando, gritando,
! allá viene la lluvia, allá a lo lejos¡

En cristalino corcel de la vida
galopando sobre ilusiones;
en mi vida, escabrosa tormenta,
apareciste Tú, saeta misteriosa;
imprevisible como los vientos,
imprescindible como las aguas,
deslumbrante como relámpago,
apacible y tranquila como final de la lluvia,
apasionada como pavorosa tormenta,
mortal rayo, violento huracán.

Así naciste: súbita, brillante, intensa; de las manos del amor;
una tarde solitaria y triste,
cuando a lo lejos llovían los truenos.



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Extraordinario poema, magníficas letras.

 

Impresionantes imágenes, hace extraordinario tu poema.
Placer de leerte amigo, saludos.

 

Imagino esa tormenta.
Un placer leerte