La verdad es que...

Me tome un largo tiempo para no decir nada de nuevo

gasté una de mis últimas postales en divagar sobre si te extraño o te quiero

la verdad es que…



Esta monótona forma de hablar es un coqueteo.



En la estación 17 hay muertos vivientes andando al compás del reloj de la torre

al tomar la buseta azul todos se mesen con un alegórico estero de bar

entre ellos los pensamientos más lúgubres se desprenden mientras el sonido corre

algunos de estos entre bromas y empujones se pretenden amar



la trasmisión continua de la estéreo siempre te hace tararear

¿Es qué el chofer es un titiritero y así los pretende domar?

la boca me hace una mueca y el golpe de realidad me hace pensar

Es gracioso, me recuerda tu forma de pensar…



No he tenido noticias de ti en mucho tiempo

siempre decías mucho sobre ti mismo era tu forma de expresar un te quiero

lo que intento decir es que…



El mundo no está completo sin tu coqueteo.



Esta competencia por llenarse de pasajeros primero arroja asfalto sobre las huestes

parece que nuestro desenfrenado titritero quisiera a los transeúntes bombardear

esa manía de acelerar maldiciendo lo hace ver cual general combatiendo invasores

para colmo las balas de asfalto se teledirigen a su rival como si lo quisiera derribar



la batalla se pausa en el semáforo el golpe en la barra me hace despertar

¿Son éstas guturales voces las que difunden un aquelarre para gobernar?

la conmoción rompió mis audífonos ahora escucho a los zombis conversar

tu deberías saberlo, era tu forma de bromear…

Me tome un largo tiempo para no decir nada de nuevo

tal vez esta sea mi última postal en mucho tiempo y no sé si quiero respuesta

la verdad es que…