La Verdad y el Sufrir (Soneto)

Expectante se asoma la tristeza engreída
en la ruta consciente del estar y el sentir,
en el duro camino de la tórrida vida,
en el tráfago recio que nos da el existir.

Y es tan fuerte su impacto, su invasión homicida,
que se vuelven terribles el quehacer, el vivir;
sin haber medicina que nos cure la herida,
sin poder evitarse la acidez del sufrir.

Dolores emboscados al filo del sendero
esperan el momento de dar el golpe artero,
minando la esperanza con cruel fatalidad.

Mas no hay que detenerse si triste mal severo,
decide en ti ensañarse con animosidad
al verte que, invencible, persigues tu verdad.


Abril y versos alejandrinos / César Guevara / 2014

 

Un soneto en alejandrinos precioso.Una causa noble y justa.Un corazon grande que llevas en el pecho..un versar sublime como tú, sublime.

 

Un gran soneto estimado poeta
sobre el sufrimiento que muchas veces nos acarrea luchar por la verdad,
un abrazo y un saludo, ha sido un placer leerte.

 

Bellísimo y profundo soneto amigo!!! Así es César, hay que luchar por nuestra verdad, por nuestros ideales. Me encantó tu obra, brilla tu pluma viejo!!! Un gran y fraterno abrazo para vos mi cámara querido!!! El entrerriano.

 

Sí que hay medicina, Cesat, que nos cure esas heridas que da la tristeza, y es leer poemas como éste. Gracias por compartirlo con los que te leemos, amigo.

Un abrazo y mis estrellas.

 

Gracias, querida, amada compañera. Siempre aquí. Siempre solidaria. Gracias.

 

Hermano, muchas gracias.
Pendiente de escribirte algo a ti, que estás en la España.
Salud.

 

Es cautivador estar entre poetas. Mujeres y hombres poetas. Es como estar en un precioso limbo. Espero que tu poesía y tú estén bien, Hermano, camarada. Obrero como yo. Saludos, che.

 

Uno quisiera tener medicinas para borrar tristezas. Tristezas que son problemas, penares profundos con garras encajadas en almas doloridas. Ojalá en verdad la poesía sirva de algo para eso, como lo dices, amigo. Y gracias por el honor que haces a mis letras.

 

Me ha gustado mucho la enseñanza que dejas en este soneto, querido César. Que a pesar de la tristeza y los dolores de la vida hay que permanecer leales a nuestra verdad, la vida es un constante caer y levantarse, nunca hay que perder la esperanza.

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