La voz en letargo

Tu lápida sigue
resquebrajando
la torpeza de mis dedos,
se manifiesta
a través del erial
en el que me he
mudado.

Sucumbir a tu abismo,
ahogar tu genio,
recordarte...
me arrastra
con fuerza titánica,
me sumerge
en lo más hondo
de este páramo
aturdido.

Así es amiga,
así es como se desprende la palabra
como la belleza se torna lodo
como te anegas de vacíos.

Así es amiga,
como también resurge
repentino.
Con un recuerdo
simplemente,
con un hálito
emigrado…
con un céfiro
que torna.

​

 

Muchos y temerosos son los vientos en contra
a lo largo de nuestra vida, sobre todo cuando arrasan con todo,
pero de vez en cuando una dulce brisa nos devuelve aquel instante
o un par de versos para seguir...
Tu voz, además de hermosa,suena con fuerza.

Un abrazo

 

Precioso sitaPalmi.

La tristeza puede estar muy envuelta de dulzura, como tus recuerdos en este poema.

No pueden ser de otra forma esos recuerdos. O si. Pero mejor recordar los buenos y los que te hagan reír y decirlo en alto, a ver si nos oyen.

Besito sitaPami.

 

Nada entristece más que un recuerdo con la fuerza de un océano en la visión de las palabras y solo una lectura me bastó para así sentirlo. Muy bello lo que poéticamente escribes Uqbar, encantada de leerte. Un saludo cordial.

 

Qué lindo amiga!! es tan dulce y conmovedor...
Un gusto volver a leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

 

Bella y profunda poesía querida amiga Palmira, enhorabuena por lo bien que escribes, un abrazo, que vaya todo muy bien.

 

Con un recuerdo
simplemente,
con un hálito
emigrado…
con un céfiro
que torna.
[
Maravilloso poema lleno de un vital sentimiento y sutil profundidad. Me ha llegado al alma.

 

Es una alegría contar con tu visión en esta voz aletargada y tienes mucha razón cuando dices que los recuerdos insuflan vida a nuestros vacíos, esa es la propuesta que se sirve en esta ocasión precisamente.
Gracias por compartir conmigo Miguel, es todo un honor.

Abrazos,

Palmira

 

Y qué sería de nosotros si nos ancláramos en esos páramos, si tiráramos la toalla cuando la tormenta nos envuelve..., te veo más con un estandarte y una banda de princesa raída en la cabeza a modo de turbante.
Gracias por la caricia Rosario, hay mucho que nos une.

Abrazos

 

Siempre me sacas la sonrisa, tienes un don especial...
Claro que es mejor reír, y con estruendo a poder ser, que se oiga alto y claro que la risa es muy contagiosa.

sitapalmitemandabesitos

 

Hola Palmira, vengo a unirme a esta pléyade de buenos y fundados comentarios acerca de tu poema.
Esos primeros veros te hacen empatizar con todos aquellos que se encuentran atravesando el duro y despiadado desierto al que a veces nos traslada la vida, pero como bien dices la palabra, en este casos tus versos delicados y profundos, nos pueden traer ese viento suave y fresco de primavera, y ayudarnos a ver la vida de una forma que nos haga la existencia más agradable.
He disfrutado mucho este poema.
Un fuerte abrazo, junto con mi cariño y admiración hacia ti.

 

La amargura o la alegría de ciertos recuerdos nos da mucha fuerza para escribir. En definitiva, lo que nos emociona. Hay que saber expresar claro y que te entiendan, ya es lo más... Esa comprensión no llega siempre a través de los conceptos que expresan las palabras, a veces, yo creo, llega a través de la emoción con la que se escribe y de la emoción con la que se lee, por eso un libro puede parecer diferente dependiendo del momento en el que lo leamos o la visión de una misma cosa. Parece que ese ha sido el caso de tu lectura. Gracias por compartirlo conmigo. Un gran abrazo Nancy

Palmira

 

Muchísimas gracias por compartir tu dulzura Nancy.

Gran abrazo.

Palmira

 

Eres muy amable compañero, me alegra mucho que te guste.

Abrazos!!

 

Que te haya llegado tan profundo es un regalo hermoso para mí. Muchas gracias por compartirlo.

Cariños,

Palmira

 

Es cierto que los recuerdos dañinos abren heridas, es inevitable que surjan porque nuestra mente está al acecho con ese cuerpo de dolor y a veces, hay que emplearse a fondo para barrer como bien dices, todo eso que no nos beneficia. Hay que intentarlo, sin duda y esas flores cantarinas que veo en tu firma son un buen mantra para ello.
Gran abrazo Maramin, muchas gracias por tu visita

Palmira

 

Descarto la sutileza de este murmullo que recibo con mucho cariño Carlos.
" abarcar esos espacios
donde el recorrido de los recuerdos sean tan
solo una emigración de murmullo."

Gran abrazo

Palmira

 

Por suerte, el duro y despiadado desierto al que a veces nos traslada la vida, puede verse colmado de un oasis inesperado como dice Maramin, o de ese viento suave que señalas en tu más que amable comentario Luis. La poesía, es sin duda un camino enriquecedor y de ayuda para mostrar con arte todo eso que llevamos dentro. No siempre el arte mostrado es del gusto de todos pero se intenta...

Muchísimas gracias por estar siempre cerca. Un gran abrazo

Palmira

 

Me ha encantado totalmente, se siente el temblor existencial, hondas imagenes que plasman tu sentir. Un gran placer volver a leerte, Palmira. Abrazos, estimada amiga.

 

Son un honor tu visita y comentario, gracias por estar entre estos letargos...

Abrazos Marius,

Palmira

 

Un poema de profunda melancolía, con una fuerza y belleza admirables.

Todo un placer leerte de nuevo, amiga.

Un abrazo.

 

Me pregunto a quién le hablas con este bellísimo poema, mis aplausos y un gran abrazo, amiga.

 

Gracias Marla, abrazos con cariño.

Palmira

 

Unas veces a ti amiga mía, otras a mí misma, otras...me embarga la emoción.

Gran abrazo Lu

 

Cerramos la memoria con llaves que no dejen escapar recuerdos y, sin embargo, qué rápido vuelven cuando los vértices del tiempo nos llevan de nuevo a ellos. Basta un aire, el mínimo soplo de viento para que de nuevo naveguen hasta nosotros, nosotros que creímos ponerlos tan lejos. Hay embrujo en las letras que conforman este poema y arrastran por las olas la memoria que no tenemos. Palabras para perderse, palabras en que encontrarnos, lujo de una poetisa que sabe llevarnos tan alto. Un beso. Luis.

 

Y si..., qué razón en eso de la velocidad de vuelta de los recuerdos, son instantes lo que tardan en presentarse y se quedan ahí, como si fuera el único modo de sentirse presencia, de no pasar a la historia, de que no los olvidemos, vuelven y vuelven una y otra vez, a veces los sentimos obsesivos y oprimen otras, nos resulta placentero seguir llevándolos en la piel...
Hermoso comentario Luis, muchas gracias por compartirlo.

Un abrazo

Palmira