Laberinto sin salida aparente.

Se pierden almas y espíritus en sus trampas
añoran saber como es el mundo de afuera
sin algún hilo de esperanza que los lleve a la salida
las vías muertas solo les causan frustración.

En el se encuentra un furioso morador
un Minotauro que se alimenta de carne y almas
los espíritus huyen aterrados de el
creen saber donde esta la salida
pero esta perfecta creación solo muestra mentiras.

Quien muere, perdido entra en el
debe saber que no se le presenta esperanza alguna,
solo sus muros cubiertos oscuras hiedras
testigos de los asesinatos que en el se encuentran.

Solo aquellos desterrados de la vida
a los cuales tememos sin razón
aquellos que se pierden en sus vías
aquello que sufren por no ver la salida;
rodeados de almas sin ver salida alguna
deciden buscar sin motivo alguno.

Las almas huyen , tienen miedo
ven la sangre, que tiñe su adoquinado
los muertos teme encontrase con la bestia,
moradora del brutal laberinto
que siempre está en nuestro cerebro.

 

Un laberinto en nuestro cerebro, que gran final!!!!
Un gusto leerte.

Saludos.

 

Siempre hay una salida..
sólo tienes que ir siempre a la izquierda
es el gran secreto..
Excelente obra...​

 

bien elaborado trabajo...un placer pasar a visitarte...un abrazo infinito...

 

tan solo nos queda dar vueltas sobre la misma estrella
ius