Le remito lo siguiente:

Te saluda el chofer,
sufrido hincha de La Academia
con sonrisa incompleta.

Se baja la puerta de la chata
y el saber deja paso a la fuerza,
para ir bajando los cosas.
Como diría Atahualpa,
"Entre dos a los abrazos con los tremendos cajones."

Atentos a que baje lo que tiene que bajar,
a contar los bultos se ha dicho,
firma y sello en el remito,
y que el resto siga viaje.

Luego en diversos expresos,
lo cargará un camión que lo llevará a
Neuquén,
Córdoba,
Mendoza,
Comodoro,
Tucumán,
o todavía más lejos.
Completando el recorrido.

Alguien, también apurado,
descargará esas piezas.
Que alguien está esperando para ensamblar quien sabe que,
en quiensabe dónde.

Eso es lo bueno de trabajar en la industria,
al contrario del poeta.
No son palabras,
son cosas que van viajando,
que se palpan.
Y que a alguien le sirven
para ir haciendo otras cosas en otro lado.

"Entre dos a los abrazos con los tremendos cajones."

Que el cerebro mande al músculo,
que el músculo tironee al hueso.
Y que todos vayan sabiendo,
que,
allá,
gracias al esfuerzo se puebla un plato,
muy distante,
y parecido al tuyo

El Poeta del Asfalto
(2006)
Chata: Nombre dado a las camionetas viejas Tipo Ford "T" y que luego se aplicó a toda camioneta antigua y lenta.

La Academia: Racing Club de Avellaneda.

Atahualpa: Atahualpa Yupanqui, seudónimo de un cantaautor argentino.

 

¡¡¡Bravo!!!, tu poesía y tú son cosa seria en este foro...aplicando la fuerza y el mundo gira, aplicando tu verso y gira sin reverso...fuerte mi aplauso y admiración. Eres soberbio en tu poesía. Abrazos y estrellas...!

 

Muy buenas letras!
Uf...
Un gusto leerte