Lola

Caminando hacia el altar Lola se da cuenta que no puede amar,
Aun se escucha el sonido de su taconear, a la mirada atenta de todo familiar,
Se confunde mira hacia atrás, su alrededor la hace temblar,
No sabe si llegar o mejor salir buscando huir hacia otro lugar.

Decide seguir, aunque ella sabe por dentro que eso no debe ser así,
Se pregunta si verdaderamente lo debe hacer… ¿será que esto es para mí?
Su corazón le dice lo contrario a su mente, ella sabe que no debe estar ahí
No puede engañar así, Lola no quiere dar el sí.

Es momento, Lola llega al lado de su supuesto amado,
Lola está consciente, sabe que el no es el hombre de su vida, no es el indicado,
Ella sabe que ese falso encanto de amor ha terminado,
Solo prosigue contra sus deseos pues esa falsedad, un fruto ha dejado.

Cierra sus ojos, no quiere cruzar su fría mirada
Con el hombre que una vez amo, mas ahora ese amor es un nada, solo estaba equivocada,
Angustiante es para ella decirlo, que carga tan pesada… ¿Como decir que ya no siente nada?
¿Cómo poder jurar ante tantos testigos?, Lola decide mejor quedarse callada.

Es momento de entregarse, en brazos de ese hombre soltarse,
Necesita salir de ahí, de toda falsedad olvidarse
Imposible se le hace, ahora son dos los que su cuerpo llevase
No puede decidir, le tocara resignarse a vivir presa de un deseo de libertad, pero le toca callarse…

Odia la llegada de ese momento, Lola cierra sus ojos lentamente
Espera un beso en sus labios, por supuesto este se le hace indiferente,
Sonreír nunca le había sido tan difícil, aun así lo hace sabiendo que es tan transparente,
En su pecho se puede sentir el calor de su pulso candente…

Es la noche tan deseada, entregarse y cerrar ese nuevo lazo contraído,
Su silencio es tan profundo, pero sabe que esto lo tiene merecido,
Lola se pierde en sus lágrimas, duele más de lo que había creído
Ella sabe que no es solo ella, en su vientre hay algo más unido…

Lola, Lola, Lola, mira hacia su ventana deseando estar sola,
Al principio era fácil, quiere que todo se vaya como una ola,
Lola se sacrifico por ese fruto, ahora hasta el la hace sentir sola,
Lola desearía huir de ahí, sin embargo el nunca la abandona.

 

Ali, cuántas historias como ésta se dan cada día llevando para una de las dos persona una gran tristeza; pero te faltó contar la historia de la otra parte que es posible que en su corazón guarde un gran amor y piense que al fin logró hacer realidad su felicidad el fatalista dirá ese es su destino, un gusto leerte.