Los inmortales 4 (La amada inmortal) alejandrinos

​

Hoy y ayer ¡cuánto anhelo y cuántas lágrimas
pensando en ti... en ti... en ti, mi vida...
mi todo! Adiós... ¡quiéreme siempre!
No desconfíes jamás del fiel corazón
de tu enamorado Ludwig.
Eternamente tuyo,
enternamente mía,
eternamente nuestros.
"la amada inmortal"
Beethoven​

Al igual que Beethoven a su "amada inmortal,"
el secreto eterniza el amor imposible;
sé también que la muerte no es el punto final,
que aquél que muere joven se torna en invencible.

El amor que apasiona y nunca se consuma
se desliza en las notas de un musical anhelo,
y en el verso sublime cual caricia de espuma,
que concede a las sombras el eterno consuelo.

De la marmórea tumba donde yace la nada,
mi sombra que te busca traspasa los umbrales,
mas allá de la muerte suspira enamorada...
Hoy sabe que los sueños también son inmortales.
​

http://www.lvbeethoven.com/Amours/LvBeethoven-AmadaInmortal-Cartas.html
"Las así llamadas cartas a la “Amada Inmortal” representan una incontrolada explosión de sentimientos apasionados dirigidos hacia una mujer desconocida. Siempre, desde el descubrimiento de la misma descrito mas arriba, la identidad de la Amada Inmortal, ha sido la causa de enorme especulación.

 

Si, es cierto, querida amiga, hay un extenso ramillete de temas de inmortales que en principio me pareció imposible.
No sabes lo importante que es para mi, que estes aquí, y tu generosa opinión,
Un abrazo enorme,
Isabel

 

Querido Luis, qué suerte que al final estés aquí una vez más con tu atenta lectura, con tu reconfortante y entrañable comentario, mil gracias, Luis.
Un abrazo agradecido.
Isabel.

 

Hola Carlos, ya ves aquí estoy respondiendo a tu propuesta, aunque en principio me pareció un reto dificil...pero ya ves que para una soñadora, los sueños tambien son inmortales...
Me ha gustado seguirte en esta aventura.
Un abrazo, desde mi mar.
Isabel

 

Querida Carmen, asi es, muchos inmortales nunca imaginaron que lo serían, y nosotros cuando creeemos que hemos creado algo genial, algo nuestro,descubrirmos que ya ellos lo habían escrito...
Gracias, querida Carmen, por tu estar aquí, todo un lujo.
Un abrazo.
Isabel

 

Querida Mar, qué suerte tenerte en mis comentarios, enrriqueces mi trabajo con tu mirada, Gracias, querida Poeta, por tus calidos y generoso comentarios.
Un entrañable abrazo.
Isabel

 

¡Hola Brisa! Un comentario hermoso, como son siempre tus letras; gracias por estar al otro lado y por tu mirada generosa, Poeta.
Un abrazo con gratitud.
Isabel

 

Querida Malena, siempre es una suerte para mi estos encuentros poéticos, y los comentarios de quien de forma placentera nos lee, y eso es lo que tú haces, querida compañera, gracias.
Un abrazo.
isabel

 

Querido Dani, qué alegria encotrarte en este espacio, posiblemente tengas razón en la sinrazón del sueño inmortal que padece una mortal y que nunca llega a cumplirse, el mar esta lleno de sueños incumplidos de emigrantes cuya travesía les se quebró en ese enorme ataúd azul del mar; por eso desde ese mas allá de esa otra inmortalidad su sombra sigue buscando cumplirlo...como verás aunque parezca espeluznante es hermoso, el sueño de un espíritu ...
No tomes pastillas, te sienta bien estar sin ellas por lo que percibo en tus letras.
Un abrazo con agradecimiento.
Isabel

 

Gracias Luis,por acercarte a leer, un honor tu visita, gracias por dejar tu huella en este espacio,Saludos cordiales,
Isabel

 

Aprecido Homo: Esta es la ventaja de los rincones de encuentros donde nuestras letras se acercan, siempre para bien, dentro de este Mundo Poesía nuestro, siempre en favor de la poesía y de la amistad.
Un placer tener tu mirada al otro lado de mis versos, estimado copañero.
Un abrazo, Poeta.
Isabel.

 

Hola José Ignacio, suerte que tienen mis versos y yo, por tu amable presencia...Lo de Beethoven , uff eso son palabras mayores, él sí que es un inmortal de casta...
Un cordial y agradecido saludo.
Libélula

 

Enacatada José Ignacio, suficientes motivos para que estes entre nosotros, espero que este lugar te sea grato y participes, en alguna propuesta si te apetece; siempre serás bien vendido,
Gracias por tu amable huella,
Isabel