Los niños apátridas

Cuanta miseria causa la vileza,
cuanto dolor reflejan las miradas
de esos pequeños niños sin futuro
huérfanos de almas hechas de alambradas.

Nunca sabrán que existe un porvenir
siempre verán que fueron doblegadas
esas ilusas formas de tener
tantas esperas rotas e ignoradas.

Cuando en el mundo existen las barreras
para parar las ansias desgraciadas
mientras se tira el pan a la basura,
otros se comen frutas ya pasadas.

Hombres de bien se llaman sin rodeos
esos que dan cosechas ya sembradas
para después pedirle al beneficio
renten con saldos tierras expropiadas.

Seres humanos dicen que nos llaman,
hienas voraces bocas no saciadas
metas avaras vacuas de futuro,
¡somos igual que ratas en manadas!

¿Quién salvará al chiquillo de ese yugo
para poder romper las alambradas?,
esas que ocultan míseras riquezas
hechas por hombres de almas descastadas.
​

Antonio Nieto Bruna
Copyright ©

 

Ojalá amigo.
Un abrazo.

 

Así es estimada Huella, totalmente de acuerdo contigo.
Muchas gracias por pasar.
Un abrazo.

 

Muchas gracias estimada Luvian por tan amable y bello comentario que dedicas a estos modestos versos. Celebro que te gustasen.
Un abrazo.

 

Así es estimado Norberto, humildemente pienso que de eso se trata.El olvido de los desamparados es la mayor injusticia de todas. Despues sguro que se puede hacer infinitamente más, pero el olvido hace que nuestra conciencia se evada y mire para otro lado.
Un abrazo.

 

Muchas gracias estimado Epimeteo por tan gentil comentario.
Un abrazo.

 

Así es estimado Castro, muchas gracias por tan excelente reflexión amigo, a estos modestos versos.
Un abrazo.

 

Impresionante Antonio.
El ser humano ha progresado en muchas cosas menos en su condición y conciencia de ser humano; el día que realmente el sufrimiento ajeno se sienta como propio quizás se rompan esas barreras.

Un abrazo
JULIA

 

Aunque algo remoto de ver, no perdamos las esperanzas, querida Julia.
Un abrazo.

 

Gracias estimada Elena por pasar a reflexionar con estas letras y esta imagen.
Un abrazo.

 

Muchas gracias estimada Mariluz, celebro que te gustasen estos versos.
Un abrazo.

 

El placer es mío estimado Ricardo de ver tu comentario en mis versos, muchas gracias por ello amigo.
Un abrazo.

 

Así es estimado Gavase, la cuestión está en conformarnos todos en tener lo suficiente para ser feliz, haciendo bueno el dicho de, no es más rico el que tiene, si no el que menos necesita.
Yo también te deseo un buen día.
Gracias por pasar.

 

La verdad estimado Eduardo, que viendo a muchos como viven en su mundo como Alicia, pienso que por mucho que se diga o se haga seguirán o seguiremos mirando para otro lado, por lo que no se si merece la pena escribir sobre ello, pienso que escribir al amor y a las flores posiblemente luzca más.
Muchas gracias amigo por tu generoso paso por estos modestos versos.
Un abrazo.

 

Ahora que lo dices estimado Laureano si que tiene un transfondo similar con la mismísima denuncia que hacía Hernández en su “Niño yuntero” aunque lógicamente salvadas las distancias, ni por el menor asomo me puedo comparar al genio de Orihuela, sería un atrevimiento por mi parte. Y en la última estrofa hasta se podría decir que he usado algunas de sus palabras como “Quien salvará a ese chiquillo” aunque el seguía más menos diciendo “menor que un grano de avena”
Consciente o inconscientemente algunas veces se usa las tendencias de tus poetas o maestros preferidos y yo he de reconocer que tanto Hernández, como Machado o como Calderón es de donde más he bebido este arte de la composición por lo que no me extraña nada tu acertada conclusión.
Muchas gracias por pasar.

 

Realmente conmovedor Antonio; a mi también me sobrecoge el desamparo que están sufriendo los niños en este mundo demencial de privaciones y abusos más allá de lo que una mente "normal" pudiera imaginar. Tu poema es una denuncia, protesta perfecta a la que me uno y apaludo.
Recibe un cordial saludo