Los oídos de la ciudad.

Y lo que va del azul oscuro a la respiración;

el rock poético y compañero, y roturado el vientre….


Los puntillismos por los olivares, y un aguijón perdido por los montes;

un aguijón perdido entre rebaños cantores…

y un nido cálido de pequeños recuerdos, y una rama en lo alto de la noche…


y aquellas espesuras repletas de significados con un cuenco místico,

y la venerable cordillera de los abrazos,

y un atrapa- sueños camino al mercado…


y los perros que ladran por las madrugadas,

y el viento de las madrugadas que trae los oídos de la ciudad.

 

Muchas gracias querido amigo Eban, me das una gran alegría con tu visita y compañía. Un abrazo, que tengas un buen domingo y una buena semana.

 

Leer sus versos amigo es un mágico caminar para los sentidos.

 

Muchas gracias por su compañía e impresiones a esta obra querido Maestro Luzyabsenta, un honor y un placer saludarle con el deseo de que tengas muy buena semana.

 

Muchas gracias querido amigo Daniel, una gran alegría tu compañía. Un abrazo!

 

Muchas gracias querido amigo Miguel, muy motivadoras tus palabras. Un abrazo, y mis mejores deseos.

 

¡Qué bella es esta línea!
Bueno, como todo el poema.
Es muy agradable pensar en montañas formando un abrazo místico. Tus universos son sitios para quedarse a vivir. Algún día inventaremos la fórmula para crear mundos tangibles y habitables a partir de las palabras
Es un placer leerte.
Un gran abrazo con cariño.

 

Muchas gracias querida amiga Cecy, siempre muy motivadoras tus palabras y apreciaciones, me ponen muy contento. Un abrazo, que tengas una estupenda semana.