Los puentes IV

Vestiré de negro el cuerpo entero.
Una soledad oscura, es una soledad real,
es una soledad de mar profundo, de cielo con aires de lluvia, de tantas cosas bellas.
Voy a vestirme de negro miedo, negro terraza en celo,
en las manos voy a ponerme trocitos de nubes negras, de las más angustiadas
y buscaré estrellas negras para usar de anillos.
No quiero que nada brillé en mi.
Yo, hoy, quiero matar todos los colores.

Y si una voz me pide perdón, pondré una fuente negra para que sus palabras sean monedas,
me haré rico de mentiras, porque el perdón es falso, porque solo el perdón es amor.
Puto dolor mío, que siempre has vestido de blanco,
usa todo lo negro en tu corazón para dañar a quien te sonría.
Borra todos los puentes, todas las avenidas que lleguen a tu boca tienen que ser negras,
como la espera, como la suerte de un ojo de boxeador...

Yo veo tantas cosas vestidas de negro en mi interior.
¿Por qué afuera todavía me ... ?
Como detesto el afuera. Que diablos importa lo que ven afuera.

 

Bellísimo escrito admirable.