Luces de colores llegadas del auxo espacio.

Parece ser que ya no somos
polvo de la misma estrella.
Y todas esas luces de colores
que nos alumbran, esas flores,
belleza verdadera, han llegado
desde los confines de la esfera
que inventa el auxo espacio
a nuestra pequeña primavera.

Todas se han quedado
en la amada Tierra
y ocupan los valles
y las altas sierras;
cuando el viento pasa
se ríen alegres
y al llegar la noche
se apagan y duermen.

 

Aunque tratamos de diferenciarnos ese polvo de estrellas siempre será un recordatorio de que todos provenimos del mismo lugar. Saludos cordiales para ti manuelo.

 

Así es, amigo Sergio; todos somos muy parecidos. Sólo nuestra obcecación nos hace a veces prisioneros de los errores que cometemos, y que nos negamos a corregir; caemos en distintos errores y eso, tan absurdo, marca normalmente nuestras pequeñas diferencias. Un abrazo. Manuelo.

 

Nunca había tenido el gusto de leerte, este portal es inmenso, y a veces nos perdemos en él .
Por suerte, encontré este poema, donde tus estrellas le dan un halo de misticismo y reflexión que llega y conmueve.
El final es bellísimo, como los días de la vida.
Un placer,
hasta pronto, poeta