Luna nívea.

Un lobo blanco, aterciopelado,
mira su Luna nívea.
La dice rompiendo
silencios.
Aullidos de etérea paz
que susurran en la noche
el baile de una princesa
bajo un claro de Luna.
Celosa guarda la Luna llena,
la cara oculta de éste poema.
Gemido
en su noche desierta perdido
Oscuridad que solo la Luna
hace clarear ante su presencia.
Reflejo de la noche, tristeza
de ojos llorosos guardada en hogueras
que empapan las tinieblas.
Respiro.
Un rebaño de ovejas vuela
ante mi presencia...

 

Me ha gustado, poema original en su idea enmarcado en una sensible y bella escritura. Un abrazo tocayo Francisco. Paco.

 

Gracias compañero. Siempre son de agradecer tus comentarios. Un saludo cordial y mis mejores deseos para tí Paco Valiente gran poeta

 

Fran que hermosa tu poesía, una manera muy especial de ver a la luna.
Disfruto muchísimo leyéndote. Recibe un beso cariñoso que se apriete
en tus mejillas.

 

Gracias Anamer por tus palabras cargadas de mágico sentir. Cariño que agradezco. Un beso cariñoso para tí. Hasta pronto princesa.